8.01.2013

El nombre de la historia lo pone usted.

agosto 01, 2013 Posted by Geraldine Bonilla No comments

Pensé en borrar cada renglón que he escrito desnudando secretos...
Pensé en rendirme y agotar mi fe...
También pensé en Dios ¿como no? Pero como todos, él no me buscó.
Pensé en usted, en sus ojos pequeños y oscuros,
pensé que se quedaría hasta que amaneciera,
pensé que me iba a querer hasta que muriera,
pensé en todo, y no pensé en el desenlace.

Creí poder sostener su corazón en mi mano -pequeña, por cierto-.
Creí que escribiéndole cada noche, enlazaba su camino con el mio,
me quede creyendo también en la suavidad de su voz, pero nunca llego a susurrar.
Creí en usted, en cada gota de sangre a su salud...
Creí en llovizna de miedos, pero nos empapamos en ellos.

Dibujé su mirada en cada espacio de mi cuarto, en cada llamada, en cada conversación ...
Dibujé monstruos gigantes y amables para que sus pesadillas fueran un tanto divertidas ...
Dibujé la forma de su cuerpo, el borde de sus labios, cada uno de sus besos en mi regazo,
pero se le olvido colorearlos, darles vida con un "te quiero" en la noche.
Y sí, también dibujé su nombre en mis cuadernos, como si tuviera aun 12 años,
pero no funciono para que me coloreara en sus sueños.

Le dedique muchas de mis canciones, unas más hermosas que otras...
Quise recordarle en las melodías de la tarde, pero me perdí en las cuatro cuerdas del bajo.
¡Puto celular que me engaña, creyendo que usted aun recuerda llamarme!
Hoy vi al diablo en su palabra, y me creí cada una de sus mentiras...
Él me dijo que lo iba a tener de nuevo en mis brazos, y que su indiferencia solo era para ganar tiempo en un abrazo.

Lo pensé, le creí, lo dibujé y le escribí ... Todo en mi estado agonizante hice por su aura (de hecho, aun lo quiero) y lo querré, lo esperaré ¿A que? No se, dígame usted, búsqueme ahora o mateme mañana ¡Al menos lloreme! Ya ni siquiera me siento segura de que nuestro pasado fue mejor, solo exista.
Pero ahora prefiere olvidarme y a pesar de que puedo hacer muchas cosas por usted, le juro que esta no logro entenderla, sin embargo me tiene desnuda a sus pies para cuando quiera volver.

Solo resuciteme ahora, suponga que esta es una llamada de auxilio y mi llanto es similar al inframundo... Sigo en su presencia, no quiero irme sin huella ¿Que desea? También le puedo escribir un poema, quizás dos, tres, cuatro, ¡Inclusive veintitrés! ...  no es lo mismo que sean para usted, a escribir en su piel. Por ahora, búsqueme y vivame como en la primera vez.