11.29.2013

Dos párrafos, para cualquier lector.

noviembre 29, 2013 Posted by Geraldine Bonilla No comments

Un día lluvioso ... fin de mes ... y las vacaciones se prestan para estar solos y dejar la mente divagar ...
¿Cómo no sentir que nada vale y que todo esta perdido? Es natural, el frío invoca fantasmas y la oscuridad es aliada de los demonios. Y no digo que todo tiene que estar bien, porque no todo resulta según el plan y seria quedar como una mentirosa ... Llora si tienes que hacerlo, grita si no te escuchan lo suficiente, escribe si no entiendes como te quieres expresar al hablar de ti ... pero no te rindas, debería ser la ultima opción.

Nadie dijo que crecer sería fácil, la mente se llena de cientos de ideas y quizás la que más pesa es "¿para que sirvo?" Ojala no te despidas de la vida por tu propia voluntad, no por lo menos cuando no estás en paz con tu alma. Deja que te quieran, que te enamoren ... permítete enamorar ... Llora como el cielo ahora, un 29 de noviembre... si quieres no sonrías, nadie te obliga; pero quiere a alguien, una sola persona al menos a quien aferrarte y no renuncies que ya viene fin de semana, fin de año y se acerca probablemente tu próximo cumpleaños.

11.21.2013

La buena noche.

noviembre 21, 2013 Posted by Geraldine Bonilla 1 comment

Buenas noches, de esas quiero pasar contigo ... Noches de danza -aunque no sepas bailar- y muchas, muchas ganas ... Noches donde no me abraces y en las cuales los besos no tengan un significado profundo. Buenas noches en tus piernas, nunca un amanecer. Me gustan tus ojos, para transformar tu mirada y reflejar en ella lo más perverso de tu ser.

No te quiero, no te amé en una vida pasada, mucho menos sueño contigo ... No estás entre mis planes, no quiero verte despertar a mi lado en la mañana, no quiero suspirar tu nombre, solo quiero fascinarme de tus detalles y la suavidad de tus manos. Cuando te escucho, no busco enamorarme (ya me enamoré, no quiero intentarlo una segunda vez). Te quiero para reír a carcajadas, no para sentir mariposas en la panza ... Me gusta pensarte en el día, chocarme con tu nombre, creer que de tantos intentos fallidos por encontrarme contigo, alguno resultará según el plan; pero no quiero dibujar tus iniciales junto a las mías, ni dedicarte canciones o fracciones de poesía. No te quiero llorar, ni remedir mi orgullo por vos ... solo busco sentir tu aroma alguna que otra vez, pero no quiero vivirte. Busco un buen amigo, uno que saque mi malicia y deje la niña tierna para mi eterno enamorado ... No pienso convencerte con ternura; solo ven si quieres estar, o si deseas irte tu despedida no la voy a sufrir.

Quiero una noche, una en la que se acabe el tiempo pero no se desperdicie ni un minuto ... Me gustas, pero no te quiero. Sobre tu pecho quiero rociar tequila, pero nunca vino. No habrá suavidad en tus palabras, solo más caricias estrepitosas e inusuales. Quiero una noche donde sepas que me iré, me escaparé de tu cama en puntitas para llegar a mi casa de madrugada, pero no me llamaras en la mañana. Y sí, son muchas condiciones para aclarar que al final no habrá ninguna ... Solo existirá esa noche, o quizás una segunda, por mucho una tercera, a la cuarta me enamoró y entonces te perderás sin remordimiento por la causa.

Mi madre no te quiere conocer, mis amigos poco se interesan si me tratas bien ... Solo yo te conozco, te busco, te deseo y te pierdo. De día te quiero a mi lado como un buen amigo, de noche serás un buen capricho. Como el juego de una película en cine que nunca fue, de citas canceladas, el deseo demostrado entre risas y bromas, con esa sencillez busco decorar las noches opacas donde me encuentre contigo a ciegas.

No te quiero compartir mi almohada, no te prepararé algo delicioso un domingo de repetir películas, no dejaré nada por ti ... Pero si me gusta tu voz, tus ojos y las risas que me arrancas. Me gustas vos, me fascina saber que no cambiaré para ti ... y que quizás, corro el riesgo de que en mucho tiempo todo esto quede como mi engaño personal. Por ahora, no muero por tu amor, pero me gusta tambien creer que habrá una vez que me encuentre contigo y olvide la ocasión para conveniencia de los dos.



11.16.2013

36 horas despierta.

noviembre 16, 2013 Posted by Geraldine Bonilla No comments

- ¡Auxilio!- Mis pensamientos me atormentan y dejé de escuchar hace mucho mis propios gritos; no soy lo que fui, no soy lo que se supone que hago cada mañana, no soy ni mis propias mentiras. Soy un paquete con huesos y siempre con música en sus oídos; soy un mendigo que recolecta muchos y muchos párrafos, buscando cual le ayudará a respirar.

- ¿Hay alguien ahí? - Sucede que soy el desastre que nadie quiere ... Me construí así, para alejar lo que me duele y no me deja volar. Parece que no resultó, ya me di contra el suelo también esta noche y el mundo no paró por segundos, nadie me vio ... es que nunca nadie ve ...

- ¿Cómo puedo remendar un alma con agujeritos? - Es que se me cortó la vista también (igual que al resto de mi gente) y desde entonces ya nada me sonríe, nada entra por mi ventana con ayuda de un par de hadas. Eso ya no existe, nada resultará bien de todo esto.

Entonces ¿quien soy? Vuelvo a repetir: no más que un cuerpo que acumula melodías, muchas y muchas canciones y un par de películas. Al escapar, soy el guardia de mi prisión, mi otro yo ... otro 'yo' que odio tanto como este. También soy el estruendo de mi conciencia mal entrenada, de una infancia mal contada. Cargo un espíritu cojeante, un malherido impecable siempre dispuesto a recordarme que voy hacia el lugar del que llegué, es decir, a la raíz de la nada ... a lo neutro de un pasaje ... ¿al nacimiento de lo mortal?

Me iba quedando grande la vida, de hecho di mi venia y me puse de rodillas para despedirla, pero nada salió según el plan. Aparecieron unos grandes ojos cafés en mis recuerdos, un abrazo que sentí en el viento y otras dos vidas más que están para sostener la mía, siempre tan adinamica.

No me queda más ahora, solo mucho frío y un gran desorden en el cuarto ... El conformismo de un corazón mal distribuido, unos besos que no me merecen pero necesito. Sin embargo, vuelvo al ciclo de caminar por horas y llenar de insectos mi cabeza, rayarme las ideas, resignarme a no ser más que un nombre y algo de desecho andante, como no.

... En conclusión, soy lo que nadie querrá pero se apegan por costumbre. Me describo como un desorden mental que un amante o mercenario no cargaría, pues no hay mucha hermosura que salga de mi voz ni de mi energía. ¿Quien correría el riesgo de enamorarse de la demencia? ¿Quien sabrá quien soy?


¡Al diablo yo! Soy la mujer a quien le huyen y la que escribe mientras sus oídos viajan con el "Meddle" de Pink Floyd.




11.06.2013

Recuerdos.

noviembre 06, 2013 Posted by Geraldine Bonilla No comments

A veces suelo pasar la mano por mi pecho, engaño a mi mente haciendo que vuelvo a jugar con tu piel ... Así te extraño menos.

Te quiero ¿Lo sientes? ... ¿Lo sueñas? Es que todo está de cabeza, por el hecho de que mis sentimientos se han vuelto sensoriales ... Pero te vas, te olvidas del alma que me sudaste, de los besos que no guardamos ... Y te vas un par de horas, confiado en mi presencia (ahí estoy).

No sé cómo hacer para extrañarte menos ... Nadie me ha dicho cómo se compensa cada error ... Tú no me enseñas a desearte cada vez menos.

Te necesito ¿Lo entiendes? Porque yo no, no sé cuanto ni bajo cual razón, pero en cualquier circunstancia solo pienso en tu olor. Y tengo miedo, más que cualquiera, miedo de creer que me enamoré, de correr sin rumbo para decaerme, o tan solo sea el miedo de alejarte con cada idiotez.

Hay veces en las que te pienso con una chispa de melancolía, otras en las que te lleno de meloserias por sentirme en paz contigo, pero hay otros días (cómo los últimos 6) en los que no te quiero hablar porque solo deseo estar juntita a vos ... ¿Me crees? Yo creo en ti -sin saber bien para que- y lo hago en ceguedad, lo hago por los instantes que fuiste tan mio y tan secreto al mismo tiempo.

Quizás soy una niña caprichosa, loca y 'malacarosa'... Es muy probable que a ratos espante de fastidio a cualquier acompañante y no me pudieron enseñar a hablar mucho de mis tormentos, por eso escribí muchos y muchos renglones para luego elegir los menos peores. Pero te deseo cuando llueve, me encantas cuando no hay clichés y te quiero aún en silencios incómodos. ¿Lo afrontarías?

Y te lo digo, porque no hay nada que no me guste de ti ... Amo hasta lo que te reprochan, por el simple hecho de disfrutar cada pedacito de tus secretos ... ¿Que seria de mi, sino amara lo que para los demás es anormal? Dejaría de querer tu alma y volvería a lo básico de la rutina, a lo mismo de siempre, a los prototipos prefabricados. Pero eres tú, solo eres tú y con eso me basta para apagar el infierno de mi cerebro, para buscar trozos del recorrido con el propósito de ser más tuya que mia por instantes, por vida.

Que me perdone la vida por cada tontedad de mujer impulsiva, por tener miedo también me inclino al perdón, porqué si no quisiera contarte los lunares entonces todo éste texto perdería el valor.

Te quiero, o eso creo ... Amo tus sueños y tu pelo, me gusta estar con vos y que el universo colapse cuando te abrazo y me empino para alcanzarte.

Y así ... Vuelvo a hacer el recorrido con la mano por mi pecho, para echarte un poco de menos ...